Dormir bien tiene un impacto positivo en nuestra salud mental y física. Sin embargo, muchas personas tienen problemas ya sea para quedarse dormidos o para mantener el sueño. El resultado es esa incómoda sensación de no haber descansado lo suficiente y, como consecuencia, no rendir en la escuela, trabajo e incluso en nuestras interacciones con otras personas.
La falta de sueño está relacionada con síntomas de ansiedad, estrés y depresión. Pero esta relación entre la falta de sueño y síntomas emocionales no es lineal, sino circular. Es decir, dormir mal puede hacer que durante el día te encuentres más sensible de lo normal, irritable y de mal humor. Y estar durante un tiempo frustrado y/o irritado puede ocasionar problemas para conciliar el sueño. De esta manera se abre un círculo vicioso que es a la vez lo que inicia y mantiene el problema del insomnio.
Las razones de una mala calidad del sueño son muy diversas. Hay ocasiones en que la causa es fisiologica, y otras, debido a síntomas psíquicos. Además, no siempre hay una causa concreta sino que el insomnio o los problemas para dormir son multifactoriales.
¿Qué hacer para dormir mejor?
Te comparto dos recursos para dormir mejor.
1. Guía del sueño:
“¿Qué necesitas saber sobre el sueño? Cómo cuidarlo, Prevención de patologías de sueño.” Se trata de una guía gratuita y breve creada por la Asociación Española del Sueño. Muy recomendable. Para descargarla, haz click aquí.
2. Algunas estrategias:
Revisa este vídeo titulado “Cómo calmar tus preocupaciones y dormir mejor: consejos de un científico para quedarse dormido más rápidamente” en donde se comparten algunas estrategias para calmar la mente antes de dormir. *Recuerda que puedes activar los subtítulos en español.
Otra opción…
Si tienes problemas para quedarte dormido te invito a poner en acción los consejos y ejercicios mencionados en estos recursos. Pero además, te invito a reflexionar.
Si crees que hay algo más allá de tus hábitos a la hora de dormir que te esté quitando el sueño, o por otro lado, si hay pensamientos recurrentes e intrusivos que no te permiten descansar, ¿por qué no darte el tiempo de explorarlos mediante la psicoterapia?
Esta decisión dependerá de ti y de tu propia brújula interna. No es necesario ir a psicoterapia para poder dormir bien… ¡Faltaba más! Pero recuerda, tampoco es necesario sufrir por los pensamientos intrusivos.
Existen muchos recursos para poder mejorar tu calidad del sueño… y de vida.